Desde la aparición del primer diente de leche, alrededor de los 6-8 meses de edad, a veces antes, es recomendable empezar a limpiar las encías con una gasa y a cepillar los dientes.
♦ Usa un cepillo suave pediátrico y agua del grifo.
♦ Usa pasta dentífrica desde el principio.
♦ Hay que controlar la cantidad de pasta que se pone: solamente el tamaño de un grano de arroz y extenderla por todas las cerdas.
♦ Es muy importante utilizar pasta de al menos 1.000 ppm desde el principio, ya que las pastas con menor contenido de flúor se ha demostrado que no son eficaces.
♦ Al cumplir los 3 años se recomienda aumentar la cantidad de pasta en el cepillo: ahora pasamos al tamaño de un guisante.
♦ Supervisa el cepillado de tus hijos y evita que traguen la pasta.
♦ Se deben realizar, al menos, dos cepillados: por la mañana y antes de acostarse.
♦ Cada 3 meses se deberá cambiar el cepillo o cuando note que se empiezan a deformar las cerdas.